Histórico. Familiar. Clásico pero renovado y también acercó a los jóvenes.


Platos abundantes, ricos, indiscutiblemente ambientado y bien atendido. Tienen carnes exóticas como jabalí a la cazadora, yacaré a la lata, o ciervo colorado.


EL VIEJO MUNICH (Ituzaingó 705)
Buena carta, familiar, decorado con muchos objetos del siglo pasado y con ese neón de colores en la esquina que lo hace fotografiable y retro. Hermoso lugar.


Comida asturiana en un subsuelo. Fabada, tortilla, pescado, empanadas y vino blanco. Una gran combinación. Mucho olor a comida. Se espera bastante si no tenés reserva.


LA PIAMONTESA (27 Febrero 554)
Típico bodegón de mesa con manteles. Comida casera, en un lugar que también es hostería. Ir con paciencia porque todo es preparado en el momento.


Uno de los lugares donde mejor comí en Rosario últimamente. Bien puesto, buenos precios, platos de calidad. Recomendados: la entraña, los tagliatelle, y la empanada de mejillones y provoleta. Es difícil conseguir lugar. Un poco más chic.


EL POPULAR DE PICHINCHA (Salta 2999)
Muy bien decorado, con mucha onda, bodegón moderno. Vajilla toda distinta, linda iluminación. La comida es muy buena. Recomendado: la costeleta ancha con puré y la tortilla.


Un ineludible de zona sur. Salón amplio, con mozos de carrera. Recomendadas las pastas con estofado, la carne al horno, el guiso de lentejas. Sirven gaseosa tamaño familiar.


CLUB SOCIAL ZONA SUD (Maipú 3051)
Platos abundantes, buenos precios, ambiente familiar. Recomendada: la pizzanesa, tamaño mega. Para irse desmayado de lleno.


Un clásico votado por muchos. Una chopería que surgió como almacén en sus orígenes y hoy es un emblema rosarino. Tiene sus yeites de bodegón, como las cazuelas de albóndigas y salchichas, y las tortillas.


EL BODEGÓN DE CHARLY (Entre Ríos 1798)
Una parte de la historia del barrio del Abasto. Lugar muy familiar, eróticamente ambientado con una especie de troncos vírgenes, y como no puede ser de otra manera, milanesas gigantes y papas fritas que rebalsan.


LA ATREVIDA (Monteagudo 243 bis)
Otro bodegón chic. Casa reciclada adornada con muchos objetos viejos, ambiente cálido, poco ruido, bien atendido y decorado con amor. La entraña es muy buena. Las pastas también. Buenos vinos.


Me debo la visita pero lo han votado mucho. Buenas pastas y milanesas. Rotación de carta. Ubicación céntrica. Ambiente agradable. Precios acordes.


LA BELLA NAPOLI (Tucumán 3598)
Para algunos venido a menos en los últimos años, para otros vigente. Sigue siendo uno de los bodegones que vienen a la mente cuando se piensa en comida a la olla y pastas. Y tiene esa estética entrañable.


Frente a la Terminal. Un par recomendaron este lugar, que siempre muestra en sus carteles una carta cuanto menos variada, y se llena los mediodías de domingo. Yo nunca lo usé para más que para tomar un vermú por la tarde. Pero lo dejo.


Otro que encontró una reversión más moderna. Platos super abundantes. Los precios están muy bien. No se tarda en conseguir mesa aunque se llena. Carta variada. El lugar es vistoso.


Como siempre digo: esta es mi humilde elección subjetiva y algo caprichosa. Elegí un criterio inclusivo porque la idea no es hacer un ranking estricto, sino mostrar que en Rosario hay buenos lugares para comer. Abrazo.




